Mientras que en algunos países optan por conmemorar San Valentín, en otros eligen festejar Amor y Amistad, eventos con nombres distintos pero con el mismo propósito:celebrar el día de los enamorados y traer nuevamente a la memoria aquel popular mito de Cupido, una historia que sin duda alguna tiene mucho que ver con el hecho de que algunas personas continúen buscando desesperadamente a su «media naranja» o «alma gemela».
Aquel símbolo de un corazón atravesado por una flecha tiene mucho que ver con la idealización del amor romántico, sin embargo resulta una buena idea conocer un poco sobre el relato que sustenta en este caso la existencia de aquel pequeño y travieso cupido.
La verdadera historia de Cupido
Históricamente este relato nos lleva a Roma e incluso a Grecia, pues en ambas mitologías Cupido era considerado el dios del amor; es así como se nos habla de un niño que pese al transcurrir del tiempo no crecía, pero siempre se le veía no solo con un par de alas sino también con arco y flecha.
A este pequeño siempre le gustó divertirse con los sentimientos de los humanos, por lo tanto empleaba sus flechas para causar tanto unión como rechazo entre dos personas. Se dice que Cupido solo creció cuando se encontró con una princesa de la tierra llamada Psique (alma) de la cual se enamoró y puesto que esta unión estaba prohibida debieron luchan fuertemente para estar juntos, esta es la explicación por la cual el amor muchas veces se simboliza con dos corazones atravezados por una flecha, es la flecha de cupido.